Retardadores de Fraguado

Retardadores de Fraguado

Los aditivos retardadores de fraguado son aquellos cuya función principal es retrasar el tiempo de fraguado del cemento (inicio y final).

Las aplicaciones principales del retardador del fraguado están en aquellos hormigones que:

  • Se coloquen en grandes volúmenes: evita una elevación considerable de la temperatura debida al calor de hidratación.
  • Tengan que ser transportados a largas distancias: aumenta el tiempo de puesta en obra del hormigón y su manejabilidad.
  • Las condiciones de colocación sean lentas: por dificultades de acceso o encofrados con formas complicadas.
  • Se coloquen con temperaturas ambientales altas: compensa la caída rápida de trabajabilidad.
  • Tengan que revibrarse: para evitar fisuras debidas a deformaciones del encofrado o unir distintas tongadas.
  • Etc.

La dosificación del aditivo retardador debe hacerse junto con el agua de amasado y no hacerlo directamente sobre el hormigón, de esta forma se evita que el aditivo quede sólo en una porción del hormigón, teniendo ésta un retraso considerable mientras que otra parte de dicho hormigón tenga un fraguado normal.

Una sobredosificación accidental del aditivo retardador trae consigo un retraso del fraguado considerable tanto más acusado cuanto mayor sea la sobredosificación, así mismo las resistencias iniciales serán bajas, aunque las finales no se vean afectadas por ello.

Debido a la gran cantidad de factores que influyen en el proceso del fraguado del cemento, como son cantidad y tipo de cemento, temperatura de los componentes del hormigón, temperatura ambiente, volumen del hormigón, dosificación del retardador, etc. no se puede determinar a priori el retraso que vamos a tener, por lo que es necesario hacer un ensayo con los mismos componentes y condiciones que se tengan en obra, y de esta forma poder determinar la dosificación óptima para el retraso de fraguado que queremos.